Pedidos de bienes duraderos en Estados Unidos y Zona Euro

El gráfico de esta semana representa los pedidos de bienes duraderos en Estados Unidos y Zona Euro desde el año 1999.

Existen muchos indicadores que están marcado una clara divergencia entre estas dos de las principales áreas económicas mundiales. Sin duda, uno de los más claros y comentados actualmente son las bolsas. Pero no es menos cierto que si se observan otras magnitudes también se puede ver este problema de fondo.

La semana pasada se publicaba el dato correspondiente a los nuevos pedidos en la industria, de manera que he querido centrarme en una de las partidas que tiene cierta relevancia, como son los bienes duraderos, aquéllos cuyo uso es superior a tres años. Para una mejor comparativa entre ambos he realizado un cambio de base al inicio del periodo de estudio.

Si bien es cierto que es un dato que atiende en el corto plazo a un patrón estacional claro, por simple observación se puede comprobar la tendencia subyacente. A partir del año 2008 la caída en Estados Unidos es muy fuerte, hasta alcanzar un mínimo en Marzo de 2009, momento desde el cual comienza una recuperación constante alcanzando en este momento niveles bastante cercanos a los anteriores a la grave crisis económica.

Por el contrario, en la Zona Euro la bajada no fue tan brusca, aunque la subida había sido más moderada que en el país norteamericano. Además, se aprecia cómo el ritmo de crecimiento había sido también mucho más bajo que en Estados Unidos después de salir de la anterior crisis. En cualquier caso, desde el mínimo marcado lo que se ha producido es un claro estancamiento, incluso con tendencia ligeramente descendente.

Aún cuando todavía hay varios economistas que apuntan a una recesión de la economía norteamericana, realmente lo que parece más probable es esperar un crecimiento lento, motivado por una desaceleración global, en gran parte debido al enfriamiento de Europa. Sin embargo, como se puede ver con este tipo de datos, entre otros muchos, quién realmente tiene un problema es la Zona Euro en su conjunto, que ya es de sobra conocido.